domingo, 10 de septiembre de 2023

Circe, de Madeline Miller


Cuando nací, no había palabra para lo que yo era. Me llamaron ninfa, suponiendo que sería como mi madre, mis tías y mil primas. Las últimas de las diosas menores: nuestros poderes eran tan modestos que apenas nos garantizaban la eternidad.

La mitología griega suele ser conocida por la mayoría de nosotros; puede que no en profundidad, pero es bastante probable que a todos nos suenen nombres como Ulises, Perseo, el Minotauro, Ícaro… Seguro que también les suenan La odisea y La Ilíada, de Homero. No obstante, la mayoría de obras que versan sobre mitología son tan densas y están tan llenas de datos que rompen el ritmo lento al que ya de por sí se desplazan sus narrativas, que el lector medio suele desistir antes de acabarlas y no volver a intentarlo. Sin embargo, existen autores tocados por el don de la magia que nos ofrecen visiones noveladas del universo mitológico que logran atrapar a los lectores desde el comienzo y los hacen vibrar con el misterio y el suspense de historias escritas con gran solvencia. Una de ellos es, sin duda, la estadounidense Madeline Miller.

En la novela Circe (AdN Alianza de Novelas, 2019), Miller se centra en la figura mitológica del mismo nombre, una diosa menor y poderosa hechicera con un talento excepcional para las pócimas. Hija del titán Helios y una náyade llamada Perse, Circe carece del esplendor y el poder de su padre así como de las habilidades seductoras de su madre. A causa de ello, es desdeñada por todos y sufre vejaciones inconcebibles por parte de su divina familia y su entorno más cercano, lo que la impele a buscar calor y compañía en el mundo de los humanos. Es gracias a un humano del que se enamora (ni siquiera los dioses se libran del arma de doble filo que es el amor), Circe descubre sus poderes de bruja, relacionados principalmente con transformaciones. Ante tal descubrimiento, el gran dios olímpico Zeus se aterroriza y obliga al titán Helios, padre de la hechicera, a confinarla en la isla de Eea, donde aprenderá a desarrollar su poder y se relacionará de cuando en cuando con otras figuras mitológicas de gran calado como el dios Hermes, Atenea, Odiseo (Ulises), su esposa Penélope y su hijo Telémaco. Por consanguineidad con la protagonista, el lector también conocerá a su hermana Pasífae, esposa del semidiós Minos y madre del Minotauro y de Ariadna; a su hermano Eetes y a su célebre sobrina Medea... Y a otros tantos personajes de los que seguro habrá oído el lector hablar alguna vez.

Madeline Miller nos muestra en Circe a una mujer imposible de olvidar, a un ejemplo de mujer que lucha por sus principios. A lo largo de sus más de 440 páginas, el lector disfrutará de una gran aventura, sufrirá con ella y llegará incluso al extremo de enfadarse con la protagonista. Si se deja llevar por la magnífica pluma de su autora, conocerá la vida de titanes y dioses, colándose en sus hogares, presenciando su soberbia en ocasiones, sus envidias y sus virtudes. Descubrirá relatos como el del laberinto del Minotauro o las alas derretidas de Ícaro y será testigo de los tórridos romances de Circe con personajes tan emblemáticos en la mitología como Odiseo, Dédalo o Telémaco. En todo momento observará las escenas en primera persona, desde la perspectiva de la protagonista, empatizando con ella prácticamente desde la primera página. Los capítulos no son demasiado largos, con lo cual no hay riesgo de caer en brazos del tedio, y la forma de narrar de la autora le regalará momentos de verdadero placer lector. En definitiva, lectura más que recomendable. 

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